“Créase el «Parque Nacional Yendegaia», ubicado en el sur de la Isla Tierra del Fuego, Región de Magallanes, provincias de Tierra del Fuego y Antártica de Chile, comunas de Timaukel y Cabo de Hornos” señala el decreto que hace 6 años, precisamente un 6 de agosto de 2014 dio origen a esta área silvestre protegida hoy administrada por la Corporación Nacional Forestal CONAF en Magallanes.
El Parque Nacional Yerndegaia, cuyo significado en yagán es Bahía Profunda, abarca un territorio de 150.587 hectáreas que abarca Tierra del Fuego y la provincia Antártica, específicamente la zona de Cabo de Hornos, los cuales fueron donados por el fallecido ecologista Douglas Tompkins, y que se caracteriza por contar con uno de los ecosistemas forestales más australes del planeta, incluyendo formaciones de turberas, glaciares y ecosistemas dulceacuícolas únicos.
Se ha comprobado que en su interior se alberga la existencia de tres especies clasificadas en estados de conservación, de las cuales dos están en categoría en peligro, huillín (Lontra provocax) y el canquén colorado (Chloephaga rubidiceps); y una en categoría vulnerable, el zorro culpeo de Tierra del Fuego (Pseudalopex culpaeus lycoides).
Además, su condición de área silvestre protegida, contribuye a resguardar el patrimonio cultural de los pueblos canoeros de la región de Magallanes, lo cual ha sido plasmado en la elaboración de su plan de manejo, herramienta de gestión de todas las ASP que se encuentran bajo la administración de CONAF. Ya en su fase final de elaboración, el plan de manejo del Parque Nacional Yendegaia será el primero desarrollado en la región bajo la metodología de estándares abiertos, la cual permite una mayor participación en las propuestas de los actores sociales vinculados al territorio.
Para el director regional de CONAF, Mauricio Véjar, “estos seis años, desde la creación del Parque Nacional Yendegaia han sido un Importante referente a la hora de aportar una nueva visión más acorde a los nuevos tiempos sobre lo que significa administrar ésta y otras áreas silvestres protegidas”
El año 2018, guardaparques de CONAF se trasladaron hasta el parque para iniciar históricamente una importante labor investigativa y de reconocimiento de su territorio para levantar información. Y en la actualidad, CONAF ya se encuentra desarrollando diseños de infraestructura respecto a la futura recepción de visitantes que lleguen a esta nueva área protegida de la región.