Reconocida amante y defensora de la naturaleza, la vecina de Placilla y voluntaria del Instituto Nacional de la Juventud (Injuv), Amanda Cabrera, de 18 años, vivió una entretenida e inolvidable experiencia como “guardaparques por un día” de la Reserva Nacional Lago Peñuelas de Valparaíso.

La Corporación Nacional Forestal (Conaf) organizó esta novedosa jornada educativa en el marco del aniversario número 67 del entorno protegido, con el fin de incentivar la vinculación de las comunidades aledañas con este “pulmón verde” porteño, que se encuentra en constante amenaza ante la expansión inmobiliaria, los incendios forestales y la escasez hídrica.

Según explicó el director regional (s) del organismo, Sandro Bruzzone, durante la actividad, la joven “recibió una charla sobre los principales recursos naturales y culturales de la reserva, y luego recorrió sus sectores más emblemáticos, para censar aves en la orilla del cuerpo de agua, monitorear el estado de las casas anideras de lechuzas blancas y tucúqueres – especies que son controladoras biológicas de roedores, entre ellos el ratón de cola larga, portador del virus Hanta-, realizar prospecciones de flora y fiscalizar el cumplimiento del reglamento interno”.

“Esta iniciativa, que se generó a partir de los convenios vigentes con Injuv, es muy interesante, ya que Amanda pudo conocer el ejercicio de la profesión de guardaparques, en qué consiste su trabajo en terreno, y no solamente ver esta actividad desde afuera, como un turista o un visitante más, lo que esperamos contribuya a aumentar su valoración respecto a esta labor y el resguardo de nuestro patrimonio natural”, agregó.

Por su parte, el administrador del entorno protegido, Óscar Salazar, resaltó que la placillana “ha participado en diferentes campañas de voluntariado ambiental, tiene una gran preocupación por el cuidado de la naturaleza y además es vecina de la reserva. Nos sentimos orgullosos de haber podido enseñarle parte del trabajo que desarrollamos diariamente”.

Respecto a las razones que la motivaron a convertirse en “guardaparques por un día” de la reserva nacional,  Amanda Cabrera expresó que “siento que es la tierra que siempre ha estado en contacto conmigo, y necesito saber más sobre donde pertenezco, por mi propio interés y conexión con el medio ambiente”.

A su vez, la joven pidió a vecinos y turistas  proteger este espacio, puesto que “se nota que necesitamos más conciencia. Yo, siendo de Placilla, sé que se entra ilegalmente y que quizás no se cuida bien”.

Amanda Cabrera, de 18 años, vivió una entretenida e inolvidable experiencia como “guardaparques por un día” de la Reserva Nacional Lago Peñuelas de Valparaíso.

Características
La Reserva Nacional Lago Peñuelas fue creada el 4 de junio de 1952, bajo el Decreto Ley N° 859. Desde  1984, junto al Parque Nacional La Campana, ostenta la condición de Reserva de la Biosfera, que otorga la Unesco.

Esta área silvestre –que posee una superficie de más de 9 mil 260 hectáreas- destaca por la protección que brinda a especies de fauna como el cisne de cuello negro, el lagarto chileno, el halcón peregrino y el gato colocolo; así como de flora, como el belloto del norte, la palma chilena, la orquídea, el lingue del norte, el quillay, el peumo, el litre, el boldo, el molle, el algarrobo y el espino.

Además de sus atractivos naturales, la reserva nacional cuenta con un centro de información ambiental, que posee muestras de la Batalla de Placilla, la cultura precolombina Bato y el avión Manu Tara, entre otras; dos senderos de libre accesibilidad: Los Coipos y Las Orquídeas; y una red de ciclorutas, con diferentes niveles de dificultad.