Su tamaño en términos esqueléticos sobrepasa al del puma, por ello es considerado el mamífero terrestre más grande que habita en Chile.  Estamos hablando del guanaco (Lama guanicoe),  el que durante la última semana estuvo bajo observación especial por parte de un equipo de guardaparques de la CONAF,  para conocer la tendencia poblacional del presente año,  al interior del Parque Nacional Lauca.

El guanaco es uno de los cuatro camélidos presentes en la región.  Al igual que la vicuña vive en silvestría;  a diferencia de la llama y alpaca que constituyen las especies domésticas del grupo.  Su estado de conservación varía geográficamente, considerándose vulnerable para Arica y Parinacota, según el Registro de clasificación de especies del Ministerio de Medio Ambiente.

Esteban Zúñiga, biólogo y encargado de la sección de Conservación de la Diversidad Biológica de CONAF regional,  explica que hasta el año 2014 los conteos de la especie se realizaban a la par con los de la taruca (huemul del norte), pero luego se determinó separar el trabajo de terreno. “La decisión obedeció a que vimos que si bien ambas especies comparten hábitats geográficos, sus comportamientos son distintos, y quisimos darle la importancia y atención que cada una requiere”, indica.

Leonel Quintana resalta que “este tipo de acciones forman parte del rol permanente que ha tenido CONAF por el tema de la conservación del patrimonio natural en materia de flora y fauna”.

Diferencias

Como diferencias más notorias, Zúñiga explica que la taruca es más selectiva a la hora de alimentarse, en tanto el guanaco es pasteador en forma amplia.  El guanaco macho además es muy territorial y tiende a desplazar a otras especies.  Otro detalle en cuanto a sus hábitos, dice relación con que el  guanaco usa un único defecadero, en cambio la taruca deja sus excrementos  en  cualquier lugar de las rutas que utiliza dentro de su hábitat.

Para las observaciones al interior del Parque Nacional Lauca los  guardaparques utilizaron la metodología de transectos. Esto significa que hicieron recorridos en línea recta de un kilómetro de extensión cada uno y de anchos variables. Para esta ocasión la programación consideraron diez transectos,  los que se recorren a pie buscando avistamientos indirectos, es decir huellas,  defecaderos, revolcaderos; y avistamientos directos de la especie. Las rutas van desde poco más de los 3000 y hasta los 4600 metros de altitud.

2016

En similar trabajo efectuado el 2016 se obtuvo una cifra de 66 guanacos avistados directamente, lo que representa la foto del momento de tales recorridos.

En la actualidad el Plan Nacional de Conservación del Guanaco, tiene como punto focal a la Región de Atacama, sin embargo las acciones de monitoreo e investigación se extienden  a todas las zonas donde existe la especie.  En este sentido Zúñiga precisa que “dentro de la programación regional el objetivo  principal al que  están abocados es estimar la tendencia poblacional al interior del Parque Nacional Lauca, ya que hacia el año 2010 los guardaparques percibieron una menor presencia lo que habría tenido su explicación en algunos brotes de sarna. Debido a ello en la tarea actual se incluyó georreferenciar a los animales con signos de contagio”. Zúñiga agrega que “ahora hemos ido percibiendo que los avistamientos se dan a una mayor altitud, lo que estaría indicando desplazamientos por sobre los 4.200 msnm, lo que no se había dado anteriormente, por eso otro de los objetivos es definir los sectores de hábitat preferente para optimizar los monitoreos,  y  contar con mayor y mejor  información sobre el recurso”.